http://dx.doi.org/10.35381/r.k.v7i2.1913
Habilidades blandas en la práctica pre-profesional del psicólogo clínico: perspectivas desde actores educativos
Soft skills in the pre-professional practice of the clinical psychologist: perspective from educational actors
Mónica-del-Carmen Tamayo-Piedra
mtamayop@ucacue.edu.ec
Universidad Católica de Cuenca, Azogues, Azogues
Ecuador
https://orcid.org/0000-0002-8285-0687
Nelson Cristóbal Reascos-Vallejo
Universidad Católica de Cuenca, Azogues, Azogues
Ecuador
https://orcid.org/0000-0002-2810-2952
Sergio Constantino Ochoa-Encalada
Universidad Católica de Cuenca, Azogues, Azogues
Ecuador
https://orcid.org/0000-0003-3067-3719
Recibido: 01 de marzo 2022
Revisado: 10 de abril 2022
Aprobado: 15 de junio 2022
Publicado: 01 de julio 2022
RESUMEN
El psicólogo clínico en su cotidiano accionar, en el trato con sus pacientes; se ve imbuido en una serie de requerimientos desde los contextos en los que se desempeña; espacios que ponen a prueba permanente destrezas indispensables relacionadas; con la atenta escucha y la empatía; habilidades consideradas de vital importancia. La investigación tuvo como objetivo analizar la perspectiva de los Actores educativos 42 participantes; sobre el desarrollo de habilidades blandas en la práctica profesional del estudiante de Psicología Clínica, y proponer un abordaje desde la academia para fomentar estas destrezas. La metodología que se aplicó de tipo descriptivo, de corte transversal; se utilizó una encuesta validada por expertos con un Alpha de Cronbach de 0,940. Los resultados informan sobre la necesidad de abordar la ética relacional, la estabilidad emocional y el desarrollo del pensamiento crítico.
Descriptores: Psicología de la educación; psicología clínica; rendimiento escolar. (Tesauro UNESCO).
ABSTRACT
The clinical psychologist in his daily actions, in dealing with his patients, is imbued with a series of requirements from the contexts in which he works; spaces that permanently test indispensable skills related to attentive listening and empathy; skills considered of vital importance. The objective of the research was to analyze the perspective of the participating educational actors on the development of soft skills in the professional practice of the Clinical Psychology student, and to propose an approach from the academy to foster these skills. The methodology applied was descriptive, cross-sectional; a survey validated by experts was used with a Cronbach's Alpha of 0.940. The results report the need to address relational ethics, emotional stability and the development of critical thinking.
Descriptors: Educational psychology; clinical psychology; academic achievement. UNESCO Thesaurus).
INTRODUCCIÓN
Tanto a nivel mundial como en América Latina y el Caribe, no ha existido una notable definición para proponer las habilidades; únicamente se asocian con conceptos como capacidades, actitudes y aptitudes; competencias, destrezas, oficios (UNICEF, 2020). Asociado a esto, los organismos internacionales han experimentado dificultades para llegar a un consenso que permita argumentar y justificar tanto acepciones como necesidad; esto con el objetivo de que las políticas gubernamentales inviertan en programas con estrategias coherentes para el desarrollo en el Marco Global de Habilidades Transferibles relacionadas a dimensiones del aprendizaje que conducen a un desarrollo humano integral; estas habilidades viabilizan la adaptación e interacción en diferentes contextos permitiendo que los sujetos los transfieran a ámbitos laborales y sociales, se denominan también habilidades para la vida, habilidades blandas, habilidades socioemocionales.
Las habilidades blandas o soft skills, tuvieron un antecedente expuesto por (Gardner, 2017), quien las denomina ,inteligencias múltiples clasificándolas en kinestésica, auditiva, visual o verbal, lógica, naturista intra/interpersonal; conjuntamente con Goleman a través de la teoría de la inteligencia emocional (Fteiha, & Awwad, 2020), describen estas destrezas como un conjunto de competencias nucleares socioemocionales, habilidades genéricas, interpersonales y relacionales ,transversales o habilidades no cognitivas relacionadas con la inteligencia emocional ,se constituyen en el engranaje para que un individuo consiga el éxito en el ámbito laboral ,profesional y personal. Desde el ámbito laboral competen aquellas destrezas que los empleadores buscan dada su correlación con un desempeño productivo.
Las habilidades “blandas” tienen dependencia con el comportamiento humano, surgen de los rasgos de la personalidad, cualidades, valores y creencias, etc. Su designación está ligada a la entidad o escuela que la difunde, recientemente su importancia se ha incrementado por la necesidad de educar a los individuos en aspectos transversales al desempeño profesional, ofreciendo una cualificación especifica de las mismas. En esta línea y con respecto a las destrezas (Cobo, 2016), define a las habilidades no cognitivas como la representación de pautas de pensamientos, emociones y comportamientos que los individuos desarrollan dentro de la formación como a lo largo de su ciclo vital. El autor enfatiza que la educación en estas habilidades debe constituirse en prioridad.
En la revisión panorámica al entrenamiento de las habilidades blandas en estudiantes universitarios como titula el artículo de (Guerra-Báez, 2019), sugiere tres aspectos claves a considerar; “conceptualizar con claridad el término e identificar las habilidades que son parte de ese grupo, como segundo elemento; identificar y adoptar teorías que sean factibles en el adiestramiento de estas habilidades aplicables a contextos en educación superior y finalmente apropiarse de modelos teóricos conceptualmente fuertes.”
Al respecto conviene decir que la asignatura de entrenamiento en habilidades blandas representa materia de interés para el currículo Universitario. Para (Vera, 2016), es un requerimiento; educar personas capaces de desempeñarse laboralmente en espacios exigentes e inconstantes. Los Institutos de educación superior se ven abocados a generar; planes, recursos o espacios que faciliten el ejercicio de habilidades socio afectivas en sus egresados.
En cuanto a la educación superior en Ecuador en el Reglamento de Régimen Académico Artículo 77 ,Recursos de aprendizaje y plataformas tecnológicas del Consejo de Educación Superior [CES] (2020) literal c refiere que “Las IES deben contar con mecanismos que fomenten el autoaprendizaje y comprensión lectora, competencias informacionales, manejo del modelo educativo a distancia y competencias informáticas básicas”; siendo parte de la normativa legal (CES) no se menciona las habilidades blandas o algo semejante en la estructura de la norma. Si bien el debate sobre habilidades no es reciente, es hasta hace poco tiempo que políticos y educadores concordaron en que deben ser consideradas directamente en los programas curriculares (Cobo, 2016) .
Esta situación hace que resulte evidente el notorio distanciamiento de los intereses relacionados a la formación de las habilidades blandas en la educación superior en el país; considerando que estas destrezas pueden entrenarse utilizando diversas estrategias metodológicas, es posible insertarlos en el currículo y la academia. Todas estas cuestiones indican que es imprescindible contar con los mecanismos para que las destrezas no cognoscitivas adquieran la importancia a tal punto que se articulen con políticas universitarias; ya que además no existe una delimitación que evidencia que funcionan de modo aislado, para (Puertas-Miramón & Orejudo-Hernández, 2016), las habilidades no cognitivas apoyan y favorecen el desarrollo de las habilidades cognitivas.
Las investigaciones de (Santos & Primi, 2014), parten del análisis de varias evaluaciones en donde refieren que los educadores, psicólogos e incluso economistas afirman que; la perseverancia, la cooperación y la responsabilidad habilidades no cognitivas se relacionan con un significativo impacto en el rendimiento de los sujetos , notan además que existe una correspondencia entre las habilidades socio-emocionales y el desenvolvimiento en las matemáticas y lenguaje de modo consistente incluso en diferentes contextos socioeconómicos . El desafío es crear herramientas de evaluación formales que sean sensibles, fiables y que visibilicen tanto aprendizajes formales como informales, que sean parte de un proceso permanente.
Desde ese precedente se estima partir del análisis de las percepciones de los actores educativos, tutores y supervisores de prácticas de diferentes instituciones cuyas políticas ;razón social o servicios consideren la importancia o no , del desarrollo de habilidades blandas de los estudiantes en periodo de práctica pre profesional en el área de psicología Clínica; para la presente investigación los objetivos de estudio son; identificar cuáles son las principales habilidades blandas desde las diferentes dimensiones percibidas o desarrolladas en la práctica, cuales se deben fomentar en la academia y finalmente elaborar una propuesta de entrenamiento aplicable a los estudiantes en formación pre profesional.
La educación superior debe adoptar una tarea académica distinta a la convencional a través del cual se ofrezca una formación integral que contemple el desarrollo teórico practico especifico de cada profesión imbuido en una ideología en donde la conciencia individual y colectiva se articule con las funciones sustantivas; docencia, investigación y vinculación. Para el estudio de las profesiones no debería únicamente contemplarse conocimientos o saberes determinados asociados a la praxis (Marrero Sánchez et al. 2018). Es necesario interiorizar y asimilar de valores, planteamientos y comportamientos que coadyuven a que el alumno en formación colabore en el cambio y el mejoramiento de condiciones sociales propias y de los demás.
Tal como ha sido descrito previamente existe la necesidad de incorporar el desarrollo de estas habilidades en la educación superior asociado esto al perfil de egreso para el profesional de la salud mental.
Referencial teórico
La ley orgánica de salud Art. 21. (Asamblea Nacional del Ecuador, 2017) el Estado reconoce a la mortalidad materna, al embarazo en adolescentes y al aborto en condiciones de riesgo como problemas de salud pública; y, garantiza el acceso a los servicios públicos de salud sin costo para las usuarias de conformidad con lo que dispone la Ley de Maternidad Gratuita y Atención a la Infancia. Los problemas de salud pública requieren de una atención integral, que incluya la prevención de las situaciones de riesgo y abarque soluciones de orden educativo, sanitario, social, psicológico, ético y moral, privilegiando el derecho a la vida garantizado por la Constitución.
El Psicólogo Clínico aplica conocimientos especiales para la investigación de la conducta humana normal y anómala; previsible en las alteraciones, los síndromes y la expresión psicopatológica que suponen los trastornos y problemas, acciona desde la evaluación, diagnóstico y análisis de intervenciones eficaces según requieran los asistidos. Para (Echeburúa et al. 2012), el profesional de esta área tiene competencias para estas funciones ,además de discernimiento ético. La Psicología clínica. Hoy da cumplimiento y obedece un fin social relevante en Ecuador pues se compromete con la planificación nacional para alcanzar el Sumak Kawsay (buen vivir) de los ciudadanos.
En el estudio efectuado por (Moreta-Herrera & Guerrero-Escobar, 2019), en el que participaron 101 psicólogos clínicos (39.6% hombres y 60.4% mujeres), con una media de 30.6 años (DE = 7.1). Se analizó la educación universitaria y las actividades asociadas al ejercicio profesional en una muestra de la zona de planificación III del Ecuador (ZP3). Los resultados mostraron que los posibles fallos en la práctica clínica profesional son atribuibles a la formación en Ecuador que entre otros aspectos contempla menor tiempo de entrenamiento; reduciendo las actividades de debate teórico, investigación, abordaje de la ética, así como la consolidación de recursos técnicos en la praxis y supervisión., los profesionales no cuentan con las competencias para afrontar las necesidades de salud mental.
Posiblemente lo sustancial para una instrucción eficaz que involucre otros desempeños, sea la incorporación como parte del currículo de las habilidades socioemocionales (Buckley et al. 2003), estas destrezas promueven la creencia en la autoeficacia que relaciona la confianza que pueden interiorizar los individuos con respecto al logro de sus objetivos al participar en entornos cuyas interacciones están cargadas de emociones hacia los demás, desarrollar esta competencia emocional involucra adquirir nueva información y conocimientos que permiten potenciar aún más sus talentos, ya sea en el academia o fuera de esta. Con respeto a lo afirmado la (OCDE, 2016) refiere “ Como las habilidades generan habilidades ; intervenciones tempranas en las habilidades sociales y emocionales pueden jugar un papel importante en mejorarlas eficientemente y reducir las disparidades educativas, laborales y sociales.
Por otra parte las Investigaciones empíricas llevadas a cabo con niños demuestran como logran alcanzar competentemente tanto objetivos personales como académicos en entornos sociales , esto es posible gracias al despliegue de una serie de habilidades interdependientes relacionadas con las emociones, la personalidad y el apego (Buckley et al. 2003). La explicación de la competencia emocional como tema clave radica en que es indispensable para; dar respuesta a las demandas del contexto social inmediato a través de reacciones adaptativas que contribuyen al logro de metas , hacer frente a desafíos, gestionar la excitación emocional para resolver eficazmente los problemas , discernir lo que sienten los demás respondiendo con empatía en relación a lo experimentado y finalmente reconocer cómo la comunicación de las emociones y la representación de estas afectan las relaciones entre personas (Buckley et al. 2003).
Las Habilidades Blandas y el modelo de los cinco factores de la Personalidad.
Para la investigación de las habilidades socioemocionales se ha empleado el modelo de los Cinco Grandes (Five Factor Model), propuesto considerablemente en el ámbito científico, durante las últimas tres décadas en las que ,se ha generado un volumen significativo de evidencia sobre su validez (Skodol, 2010). Con respecto a los rasgos de la personalidad considerados en el modelo Eysenck (Padrell, et al. 2020), establecen que son dicotómicos o bipolares, lo que significa que puntuaciones altas en una escala implicará cierto grupo de características que serán opuestas a las de sujetos que obtengan resultados bajos.
Este modelo plantea cinco dimensiones para el análisis de las habilidades blandas o socioemocionales: el neuroticismo (estabilidad emocional), la extraversión, apertura a la experiencia, afabilidad y escrupulosidad. Esta propuesta es un modelo al que más se ha recurrido a nivel internacional para investigar las habilidades socioemocionales , ya que examina una amplia descripción de estas destrezas constituyéndose en una ventaja (OCDE, 2016) para la investigación de las mismas en sujetos de diferentes grupos.
El neuroticismo considerado en sentido inverso como estabilidad emocional resulta idóneo para el enfoque positivo en el estudio de las habilidades, los sujetos que obtuvieren puntuaciones altas se caracterizan por la expresión del autocontrol, tolerancia a la frustración, y estabilidad, así como sentido de compromiso con las instituciones en las que trabajan , reportando mejores niveles de satisfacción en las relaciones sociales (Santos et al. 2019).
La segunda dimensión la extraversión; caracteriza a los sujetos por su despliegue de energía y entusiasmo se relaciona con la sociabilidad, actividad, asertividad y en general sentimientos que se consideran como emocionalidad positiva. Amables, amistosos, disfrutan con otros expresando seguridad, son activos verbalizan la experiencia cognitiva y emocional, suelen lograr un estatus sobresaliente en los grupos sociales, suele contar con un considerable grupo de amigos. Continuando con esta descripción se integra la dimensión Apertura a la experiencia, altos niveles en este factor, caracterizan la creatividad, considerada otra variable psicológica que conduce al crecimiento personal, la disposición para asimilar nuevas experiencias es la apertura. Generalmente las personas que lo poseen buscan soluciones inteligentes a los problemas (Thompson et al. 2002).
La Afabilidad, para (Santos et al. 2019), estaría integrando las destrezas socioemocionales de las personas cuyo desempeño sobresale por sus marcadas orientaciones al comportamiento pro social e intereses por el bienestar comunitario, destacan por ser sujetos percibidos como; confiables, sinceros, solidarios de gran sensibilidad a los demás, no emplean la autoridad o no imponen su criterio para resolver conflictos que pueden situarse con otros individuos.
Finalmente, la dimensión responsabilidad, define a personas que se guían por normas y reglas, son organizados y en los procesos de planificación de tareas son metódicos y ordenados, jerarquizan las actividades con autodisciplina y metas claras que se asocian a las áreas en la que se desenvuelve, social, académica, familiar, etc. En base a estas características mencionadas, los investigadores han explorado la relación entre los rasgos de personalidad y el rendimiento académico, la procrastinación, la salud y para el presente estudio las habilidades blandas (DeYoung et al. 2016).
Contextualizando el espacio de educación superior para Vera (2017) ,la Universidad se encuentra expuesta a presión debido a que las instituciones y sus empleadores requieren personal especializado que ponga en manifiesto cualidades individuales y habilidades blandas que los caracteriza por ser colaboradores, adaptables, proactivos, resilientes; esto justifica la necesidad de infundir estas destrezas en el currículo e implementar estrategias metodológicas y de evaluación que incrementen la calidad de las propuestas educativas.
En concordancia con lo antes referido las habilidades transversales es materia de alto interés para el currículo Universitario; ya que agrega una perspectiva de educación integral como propuesta a la empleabilidad centrando la educación en la formación de habilidades que se perfila indispensable para el avance de personas y países. Las instituciones de salud mental, hospitales y clínicas que proveen servicios al sector; demandan de especialistas altamente efectivos, para la atención de individuos en situación de vulnerabilidad, afectados emocionalmente, con respuestas a los acontecimientos vitales estresantes y diversas patologías, es fundamental que el personal especializado sea capaz de compatibilizar coherentemente conocimientos técnicos con habilidades socioemocionales.
El aprendizaje Social
Identificado también como aprendizaje vicario, por modelado o aprendizaje cognitivo social, se desarrolla en un entorno en el que ocurre interacción social entre dos personas; el modelo que ejecuta un comportamiento especifico y el individuo que observa la conducta realizada. Esta observación determina el aprendizaje social (Bandura, 1977),en donde no se estima que el que aprende el comportamiento reciba un refuerzo ya que lo hace por imitación de la conducta. El aprendizaje por observación cumple una función informativa tanto de comportamientos como de resultados o consecuencias asociadas a estas conductas.
Los sujetos incrementan sus habilidades y desempeños de modo operante e instrumental en donde interfieren factores cognitivos entre la observación y la imitación en donde el sujeto decide finalmente el comportamiento que ejecutara, en este espacio la capacidad de reflexión y la simbolización, anticipación a las consecuencias relacionadas con los procesos de comparación , generalización y autoevaluación están mediados por el entorno pero mucho más por los aspectos inherentes al sujeto mismo como la motivación, retención y la ejecución motriz.
Bandura (1977) plantea que las respuestas emocionales también son aprendidas mediante la observación directa, de este modo habilidades blandas como la empatía, el autocontrol y la regulación emocional frente a circunstancias adversas también pueden ser susceptibles de entrenar., porque las personas no cuentan únicamente con un repertorio comportamental innato, estas son aprendidas socialmente y como tal sensibles al cambio.
El carácter cambiante en la perspectiva del proceso de enseñanza-aprendizaje de las habilidades blandas es determinante ya que, admite que la repercusión del medio incide en los repertorios conductuales elaborados por las personas, mediante mecanismos cognitivos intermedios como la imaginación, la representación y el pensamiento que son decisivos para la elaboración de las mismas, en otras palabras los matices en la experiencia emocional se deben a pistas contextuales que influyen en la interpretación de la situación. Por lo tanto, la teoría del aprendizaje social puede ser es considerada la base teórica en el que los maestros identifiquen estabilidad para promover y sostener la importancia de realizar un adiestramiento directo de las habilidades socioemocionales.
Aspectos de la propuesta
Las competencias emocionales parecen influir en el desenvolvimiento social y en las relaciones con los pares, no obstante, el enfoque de mencionadas competencias es más amplio que el de la inteligencia emocional, ya que involucra mayor variedad de habilidades socioemocionales; partir de este abordaje para el desarrollo emocional de niños y adolescentes parece lo adecuado. Buckley et al. (2003) complementario a esta estimación o quizá el punto de partida exige una visión integral de las herramientas adecuadas para la evaluación de mencionadas destrezas y con el objetivo de realizar una posterior intervención, cabe señalar que pueden surgir dificultades asociadas a la medición de las competencias emocionales.
El dilema del entrenamiento en habilidades blandas radica además en la correcta elección del enfoque en el que habrá de basarse para desarrollar estas competencias ya que están conformadas adicionalmente por habilidades para aprender, analizar, gestionar el tiempo e innovar. Mencionados aspectos representan más que un conjunto de habilidades que permiten la interacción con otros. Hacer estas distinciones, será clave para dimensionar y esclarecer los retos desafíos que conlleva el abordaje y el entrenamiento de las habilidades blandas (Guerra-Báez, 2019).
Infundir las habilidades blandas en el currículo para (Vera, 2017), contribuye con el ajuste de la persona a los nuevos escenarios y contextos en los que se desenvuelven, estos espacios comprueban la habilidad de adaptación a los cambios, la generación de soluciones creativas para resolver desafíos de manera efectiva constituyéndose capital humano de calidad. En el currículo de educación superior, no se aborda las competencias socioemocionales, habilidades transversales que otorgan valor agregado al desempeño en la práctica preprofesional.
Thieme (2007) indica precisamente las habilidades blandas de los universitarios no son el resultado de la educación ofrecida por la academia en la instrucción superior, que por el contrario responden a características propias del estudiante como la personalidad y la interacción de esta con el contexto en el que se desenvuelve. Es necesario acotar que objetivamente la propuesta del desarrollo de estas habilidades, no será producto de la profesionalización hasta que la universidad lo adopté como una corresponsabilidad y lo situé como un elemento fundamental en la formación de la comunidad que en ella se educa permitiendo su desarrollo como persona desde lo integral.
METODOLOGÍA
Para el desarrollo de la presente investigación se estimó un enfoque no experimental, de alcance descriptivo exploratorio, de cohorte transversal; para esto se consideró la revisión bibliográfica de estudios empíricos que informan sobre la importancia del tema a investigar en poblaciones semejantes.
Se utilizó la técnica de adquisición de información cualitativa a través de la entrevista con preguntas semiestructuradas a través del dialogo mantenido con grupo focal, procedimiento que permitió validar desde la experticia de los involucrados la encuesta para el abordaje cuantitativo. Mencionado instrumento tiene como objetivo conocer la percepción de los actores educativos; directores, tutores y supervisores sobre las habilidades blandas que han observado como destreza en los Psicólogos Clínicos, que realizan su práctica Preprofesional; ya validada por consenso de expertos la encuesta se aplicó la prueba de fiabilidad del instrumento mediante Alpha de Cronbach con un 0,940.
La encuesta se generó desde la plataforma Forms Google,esta construida con 21 preguntas asociadas a cinco dimensiones; estabilidad emocional, extraversión,apertura a la experiencia,afabilidad, concluyendo con la dimensión; escrupolosidad y conciencia ; cuenta además con un apartado de 10 preguntas que indagan sobre la recomendación de los Actores educativos sobre que habilidades considera se deben fomentar en la academia.
Mencionada encuesta se aplico a 42 profesionales representantes de Clínicas de Adicciones, Casas de Acogida a Menores,Centro de Neurodesarrollo, Centro de Investigación y Tecnologia ; Instituto de Neurociencias, Directores de Carrera Universidades Publica y Privada, Coordinadores de Unidades Asistenciales en el Seguro Social Adulto Mayor;Departamento de Psicologia de las Fuerzas Armandas del Ecuador, Centro de Rehabilitación Social, Geriatricos, Unidad de Diagnóstico Psicopedagogico,Centros de Reposo. Profesionales; Psiquiatras, Psicologos Clínicos , Psicologos Educativos, Neurocientifico. Para el análisis de datos se recurrió a la estadística descriptiva con el apoyo del software SPSS.
RESULTADOS
En primera instancia se procedió con el análisis de normalidad de datos con la prueba de Shapiro Wilk, estableciendo que todas las variables son paramétricas, a continuación, se detallan los principales hallazgos:
Tabla 1.
Habilidades blandas percibidas contantemente por los actores educativos en la práctica pre-profesional de los estudiantes.
|
Habilidades blandas |
Opciones |
Frecuencia |
Porcentaje válido |
|
|
Estabilidad emocional |
Autocontrol |
Casi Siempre |
26 |
61,9 |
|
Tolerantes a la frustración |
Casi Siempre |
25 |
59,5 |
|
|
Comprensivos |
Siempre |
13 |
31 |
|
|
Estables |
Siempre |
7 |
7 |
|
|
Extraversión |
Amistosos |
Casi Siempre |
23 |
54,8 |
|
Comunicativos |
Casi Siempre |
23 |
54,8 |
|
|
Optimistas |
Casi Siempre |
23 |
54,8 |
|
|
Amables |
Siempre |
17 |
40,5 |
|
|
Apertura a la experiencia |
Valoran la expresión emocional |
Casi Siempre |
22 |
54,4 |
|
Experimentan afectos positivos y negativos más que los demás |
Casi Siempre |
18 |
42,9 |
|
|
Afabilidad |
Sinceros y Confiados |
Casi Siempre |
23 |
54,8 |
|
Capacidad para el perdón |
Casi Siempre |
23 |
54,8 |
|
|
Solidarios y Generosos |
Siempre |
13 |
31 |
|
|
Empáticos |
Siempre |
13 |
31 |
|
|
Escrupulosidad/conciencia |
Metódicos y Ordenados |
A veces |
21 |
50 |
|
Responsables |
Casi Siempre |
20 |
47,6 |
|
|
Éticos |
Siempre |
13 |
31 |
|
Fuente: Encuesta.
Al realizar el análisis sobre los resultados habilidades Blandas identificadas como Siempre; se evidencia que en la dimensión; Extraversión se reporta que el 40,50 % representa la expresión de amabilidad; en las dimensiones Estabilidad Emocional; habilidades Blandas comprensivos el 31% y siempre estables el 7%. Las dimensiones Afabilidad, se representa siempre a través de las habilidades solidarios y empáticos con un 31%. Finalmente, en la dimensión Escrupulosidad y Conciencia, la ética evidenciada representa un 31%.
Tabla 2.
Representa las habilidades blandas no identificadas por los actores educativos en la práctica pre-profesional de los estudiantes.
|
Habilidades blandas |
Opciones |
Frecuencia |
Porcentaje válido |
|
|
Estabilidad emocional |
Comprensivos |
Casi Nunca |
2 |
4,8 |
|
Estables |
Casi Nunca |
1 |
2,4 |
|
|
Extraversión |
Demuestran Autoridad |
Casi Nunca |
3 |
7,1 |
|
Optimistas |
Casi Nunca |
1 |
2,4 |
|
|
Apertura a la experiencia |
Rechazan la rutina |
Casi Nunca |
7 |
16,7 |
|
Se interesan por argumentaciones intelectuales |
A veces |
21 |
50 |
|
|
Afabilidad |
Capacidad para el perdón |
Casi Nunca |
3 |
7,1 |
|
Escrupulosidad/conciencia |
Tienen metas claras |
Casi Nunca |
5 |
11,9 |
Fuente: Encuesta.
En la tabla que estima la frecuencia “Casi Nunca” ; llama la atención que los actores educativos , perciben que los estudiantes de psicología clínica que realizan su practica preprofesional en diferentes instituciones; A veces se interesan por argumentaciones intelectuales referido por el 50% de encuestados, otro porcentaje que llama la atención es el de 11,9 % que representa casi nunca tienen metas claras.
Tabla 3.
Fomento de habilidades blandas mencionadas por los tutores.
|
Dimensiones y habilidades |
Fomentar en la Academía |
Frecuencia |
Porcentaje válido |
|
Tolerancia a la frustración |
SI |
30 |
71,4 |
|
Autocontrol |
SI |
28 |
66,7 |
|
Pensamiento Critico |
SI |
37 |
88,1 |
|
Creatividad |
SI |
36 |
85,7 |
|
Ética Relacional |
SI |
36 |
85,7 |
|
Responsabilidad |
SI |
32 |
76,2 |
|
Prudencia |
SI |
28 |
66,7 |
|
Amabilidad |
SI |
22 |
52,4 |
|
Sinceridad |
SI |
19 |
45,2 |
Fuente: Encuesta.
Los resultados de la encuesta aplicada a los profesionales , directivos, supervisores tutores que para efecto de la investigación se denominaron actores educativos ,revela desde su apreciación que las habilidades blandas; Pensamiento Crítico representado por el 88,1% , seguido de Creatividad y Ética Relacional 85,7% son las destrezas que estiman se deben fomentar en la académia.
DISCUSIÓN
La percepción de las habilidades blandas estimada por los actores educativos sobre la práctica preprofesional de estudiantes de la carrera de Psicología clínica, Revela que un porcentaje significativo de estudiantes son percibidos por expresar estabilidad emocional y las habilidades Autocontrol y tolerancia a la frustración, aspectos esenciales en la práctica y manejo con pacientes.
De acuerdo con el análisis realizado por Moreta-Herrera & Guerrero-Escobar (2019) sobre las competencias del Psicólogo clínico y la dinámica general del trabajo identifican que los posibles fallos en el ejercicio de la práctica clínica, son debidos a la formación del psicólogo clínico en Ecuador, considerando que la formación profesional con menor tiempo de entrenamiento (menos discusión teórica, investigación en el campo, manejo de la ética y tiempo de consolidación de métodos científicos para la práctica y la supervisión clínica) puede incidir en la calidad de la atención. Aspectos que concuerdan con la sugerencia de implementación o habilidades blandas que se deben fomentar en la academia; siendo la ética una de las variables identificadas en concordancia.
Del mismo modo en Chile se enfatiza la necesidad de que los planes de estudio incluyan el desarrollo de competencias transversales o genéricas, tales como, pensamiento crítico, solución de problemas, desarrollo de relaciones interpersonales, autoaprendizaje e iniciativa personal, trabajo en equipo (Vera, 2017). Los datos encontrados, ofrecen la percepción de los actores educativos sobre la percepción de las destrezas en la práctica, en relación a las recomendaciones se realiza la propuesta de entrenamiento de habilidades. Aspectos desarrollados en el esquema correspondiente a la sección Propuesta.
PROPUESTA
Para el desarrollo de esta propuesta entrenamiento directo de habilidades, o infusión de habilidades blandas se considera 4 fases o momentos específicos que a su vez se subdividen en otros espacios de instrucción complementarios que se consideran momentos de la práctica o ejecución cada una de ellas.
Para este propósito , estas fases se denominarán de Investigación en la que ocurre un proceso de selección de instrumentos para la evaluación de las habilidades blandas de los individuos, con un respectivo diagnóstico como resultado que informará; sobre los objetivos a plantearse en la planificación de actividades y contenidos abordar de acuerdo a las necesidades identificadas, continuando con la fase de aplicación técnica, experiencial y finalmente la fase de monitoreo en donde ocurre además un proceso de autoevaluación de las destrezas adquiridas.

Figura 1. Entrenamiento directo de habilidades blandas
Elaboración: Los autores.
CONCLUSIONES
Los actores educativos externos desde su rol de tutores y supervisores de la práctica pre-profesional de estudiantes de psicología clínica consideran que las Habilidades Blandas identificadas representan un porcentaje bajo desde la expresión en la práctica , estas habilidades están relacionadas con la estabilidad emocional, y concuerdan con casi nunca son comprensivos y estables frente a la tolerancia a la frustración y autocontrol casi siempre representadas con porcentajes más altos en la misma dimensión.
Es importante desde el perfil del Psicólogo que se perciba que, valora las expresiones emocionales de sus asistidos y la experiencia de afectos positivos y negativos más que los demás.
Los resultados de la dimensión apertura a la experiencia y las habilidades blandas interés por argumentaciones intelectuales reporta un interés percibido como a veces.
Casi siempre percibidos como responsables, así como metódicos y ordenados estimado por el 50 de los encuestados, convoca a la reflexión, esto sumado a las recomendaciones realizadas sobre fomentar en la academia la Ética Relacional y el pensamiento crítico.
FINANCIAMIENTO
No monetario.
AGRADECIMIENTO
A los docentes de la carrera de Diseño de Interiores de la Universidad Católica de Cuenca, por permitir y apoyar el desarrollo de la investigación.
REFERENCIAS CONSULTADAS
DeYoung, C. G., Carey, B. E., Krueger, R. F., & Ross, S. R. (2016). Ten aspects of the Big Five in the Personality Inventory for DSM-5. Personality disorders, 7(2), 113–123. https://doi.org/10.1037/per0000170
Asamblea Nacional (Ecuador). (2017). Ley Orgánica de Salud (Reforma, 2017). Asamblea Nacional, 1–50. https://n9.cl/wadnq
Bandura, A. (1977). Social learning theory, a book review. Group & Organization Studies, 2(3), 384–388.
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